En esta prueba vamos a ver el segundo producto de la firma suiza Irix en su versión Firefly, el primero fue el 15/2,4, angular que analizamos en Diciembre del año pasado. Recordar que las versiones Blackstone y Firefly son idénticas en cuanto a formula óptica y calidad de su rendimiento se refiere.

Con este segundo ultra-angular la empresa suiza sigue apostando por estas focales por motivos, entre otros, que podrían obedecer a la facilidad de uso de enfoque manual de los objetivos de esta tipología. Teniendo como plus la gran profundidad de campo y su fácil manejo, en cuanto a enfoque se refiere, también implican un diseño óptico más sofisticado que el de otras focales y unos controles de calidad más estrictos.

En lo que concierne a diseño exterior, materiales, ajustes y embalaje en este 11 mm. se repite de forma idéntica lo que vimos pasado Diciembre en el 15 mm..

A continuación una fotografía del objetivo, la ficha de los detalles de diseño y operativos y la de c.c.t.t.
 

Chasis: metal-plástico termoestable.
 
Exterior: plástico termoestable.
 
Bayoneta: aluminio anodizado, acabado medio.
 
Elementos telescópicos: ninguno.
 
Aislamiento externo: con junta de caucho tórica y túnel interno de desplazamiento de pupila.
 
Anillo enfoque manual: directo sobre helicoidal. Con click en hiperfocal y anillo de bloqueo de posición. Ajustes laterales y longitudinales excelentes.
 
Tipo de enfoque: interno por grupo delantero, el elemento frontal no rota.
 
Parasol: integrado de pétalos.
 
Ventana de distancia: No tiene. Los metros orientativos se encuentran serigrafiados en al anillo de enfoque.