Tribus de Etiopía: Los Hamer


El río Omo es un auténtico santuario para el viajero, uno de los pocos paraísos que todavía quedan donde se encuentra la mayor diversidad étnica de África y probablemente del mundo. Allí habita una miríada de tribus que mantiene intactas sus costumbres y formas de vida ancestrales. Para recorrer este territorio salvaje y conocer el fascinante mundo de sus
culturas nada mejor que empezar por los Hamer, el grupo más numeroso.

 

 
3-06-2.011

Al suroeste de Etiopía se encuentra la región denominada “Naciones y Pueblos del Sur”. En ella hay dos grandes parques nacionales, el del Omo y el Mago, donde se reúne la mayor concentración de tribus y etnias de África, un universo aparte, un territorio donde el tiempo se detuvo hace muchos siglos.
 


Estos parques nacionales son de difícil acceso; para llegar a ellos y recorrerlos es preciso hacerlo en vehículo todoterreno, sin embargo los paisajes y la diversidad cultural que ofrecen hace que el esfuerzo merezca la pena sobradamente.

 

 

Panasonic LX5
Focal: 28 mm.
Diaf.: f 1:4
 
     

El río Omo no desemboca en el mar sino que muere en el lago Turkana, prácticamente en la frontera con Kenia. Muy cerca de allí, al norte, se extiende el territorio de los Hamer, la tribu más numerosa de la región. Nos encontramos a mil kilómetros de la capital, Addis Abeba.

 

 

Canon 5D
Focal: 160 mm.
Diaf.: f 1:8
 
     

La mayoría del territorio de las Naciones del Sur debe atravesarse rodando sobre pistas, las cuales se vuelven intransitables durante la época de lluvias que suele coincidir con los meses de Marzo y Abril, período en el que los Hamer permanecen en sus aldeas ocupándose de tareas domésticas.

Cuando llueve lo hace de manera torrencial con cambios muy bruscos. En la fotografía, si hubiéramos tardado cinco minutos más en llegar a este punto la crecida de este río nos hubiera impedido pasar y habríamos tenido que retroceder para acampar a la espera de que el caudal volviera a permitir el paso.

 

 

Panasonic LX5
Focal: 28 mm.
Diaf.: f 1:2
 
     

Después de las lluvias, de Mayo a Septiembre, los pastores retoman la vida nómada para trasladarse con sus rebaños en busca de buenos pastos. Finalmente, durante la época seca que se extiende desde Octubre hasta Febrero, vuelven a los poblados para dedicarse a la siembra de sorgo, mijo y maíz principalmente.

 

 

Panasonic LX5
Focal: 28
Diaf.: f 1:3,4
 
     

Los Hamer, como casi todos los grupos étnicos vecinos, practican antiguas creencias animistas, viven de la agricultura y –sobre todo- del pastoreo de vacas y cabras. Otra de sus habilidades es la recolección de miel, en lo que son verdaderos expertos.

 

 

Nikon D700
Focal:70 mm.
Diaf.: f 1:10
 
     

Los hombres lucen peinados muy característicos sobre los que se colocan adornos de colores y plumas. Si llevan un casquete de piel o pelo significa que han cazado un gran animal salvaje.

 

 

Canon 5D
Focal: 115 mm.
Diaf.: f 1:6,3
 
     

Frecuentemente exhiben cartucheras de cuero en la cintura ya que los hombres Hamer como los de otras tribus vecinas portan rifles para defenderse de las alimañas y, en ocasiones, para resolver diferencias entre tribus rivales generalmente por cuestiones de robo de ganado.

 

 

Nikon D700
Focal: 42 mm.
Diaf.: f 1:10
 
     

Todos los hombres, sin excepción, llevan palos, paraguas o viejas sombrillas que usan a modo de bastón y también para apoyar la carga sobre los hombros. Otro accesorio imprescindible para el hombre es un pequeño taburete de madera que sirve tanto de asiento como de almohada cuando se tumban a dormir.

 

 

Nikon D700
Focal: 29 mm.
Diaf.: f 1:9
 
     

El cultivo más extendido en esta zona es el sorgo, un cereal que soporta el calor extremo, es muy resistente a la sequía y se conserva durante largo tiempo en los graneros.

Cuando los granos maduran es preciso defenderlos de la voracidad de los pájaros; para ello, los Hamer construyen unas pequeñas plataformas elevadas en mitad de estas plantaciones desde las cuales niños y jóvenes pasan la mayor parte del día disparando piedras con sus hondas a todo pájaro que se acerque a comer el grano.

 

 

Canon 5D
Focal: 75 mm.
Diaf.: f 1:2,8
 
     

Es difícil que los Hamer padezcan hambre o sed por la falta de lluvias. Conocen palmo a palmo su territorio y saben dónde encontrar agua en cualquier época del año. Cuando las cosas se ponen difíciles recurren a excavar los cauces secos de los ríos en los puntos donde corren aguas subterráneas.

 

 

Nikon D700
Focal:70 mm.
Diaf.: f 1:3,2
 
     

Hace una década el gobierno etíope construyó una red de pozos con manivela para que estas tribus tuvieran un mejor acceso al agua en temporada seca y extrajeran el agua más limpia y saludable, ya que la que obtienen de los agujeros que perforan es muy turbia, de un color marrón grisáceo.

 

 

Nikon D700
Focal: 70 mm.
Diaf.: f 1:9
 
     

Como en toda África, la tarea de recoger agua y transportarla hasta el poblado corresponde a las mujeres. Para ello utilizan calabazas secas, aunque cada vez es más frecuente verles con los típicos bidones de plástico amarillo tan extendidos en Etiopía.

Cargan tanta agua como les es posible aguantar sobre su cuerpo para no tener que hacer dos viajes, ya que los desplazamientos son muy largos. A diferencia de muchos lugares del mundo, estas tribus africanas no transportan nada sobre la cabeza sino en las manos o a la espalda, mediante unas rústicas mochilas que fabrican con cuerdas y pieles de cabra.

 

 

Nikon D700
Focal: 70 mm.
Diaf.: f 1:9
 
     

Es difícil de creer pero la rueda no existe, no se utiliza, es como si no la conocieran. No hay carros ni animales de tiro y todos los desplazamientos los hacen caminando y cargando sobre su cuerpo todo el equipaje.

Como ya vimos en nuestro viaje al País Dogón, la calabaza juega un papel imprescindible en la vida de los pueblos de África. Entera sirve para almacenar y transportar líquidos, grano o harina; cortada por la mitad es un excelente cazo para servir, comer, beber o protegerse la cabeza del sol abrasador.

 

 

Canon 5D
Focal: 102 mm.
Diaf.: f 1:8
 
     

Etiopía siempre ha presumido de la belleza de sus mujeres, no en vano tienen fama -y bien ganada- de ser las más hermosas de África. La mujer Hamer es muy llamativa. Sus facciones son armoniosas y cuidan mucho su aspecto desde niñas.

 

 

Nikon D700
Focal: 70 mm.
Diaf.: f 1:6,3